¿Sabes por qué ese competidor, al que envidias, gana bastante más billete que tú?

La respuesta es sencilla, aunque igual te irrite.

Algunos emprendedores y empresarios deciden creer que, para ganar más billete, basta con tener buenos productos y/o servicios. Dicen algo así: “Si hago bien mi trabajo solo es cuestión de tiempo hasta que el boca a boca haga el suyo”. Sí, cómo no…

 

¿Qué quieres que te diga…?

Pensar así, es como creer que para conquistar una chica solo tienes que ser buena gente y que, antes o después, todas las mujeres que tienes cerca verán el partidazo que eres, correrán hacia ti, y tropezarán contra el piso para estar contigo. No.

 

Te cuento.

La verdad -la simple y cruda verdad- es que solo hay dos tipos de personas en el mundo, las que saben vender y las que no. Y los que saben vender ganan más billete que tú. Ya respondí la pregunta del titular de esta página.

 

Así de sencillo.

Y es que cuando sabes ¡vender!, eres capaz de vender lo que sea, productos, servicios, ideas, etc… no te para nadie.

 Y al contrario, mientras no sepas vender, olvídate de tener un negocio rentable y más cash… eso si, mucho estrés -no me digan que no-, he pasado por ahí. Y es horrible esa sensación.

 A lo bien…

¿Has llegado a pensar lo ridículo que es tener un negocio y no saber vender?

Es como querer tirarte en paracaídas sin paracaídas. Como ir de pesca sin anzuelos. O como querer hacer un asado sin carne. Así de ridículo.

El problema, el verdadero problema, es que no nos enseñaron a vender. ¡Carajo!

Ah, pero lo que si nos enseñaron fue: Trigonometría, cálculo, ciencias, estética, bla,bla,bla. Pero…¿De cómo ganar más dinero con lo que estudiamos o crear negocios? nadita, nadita… ni pito. Lo que sí se repite mucho es: estudie y trabaje mijo para que se gane la vida… ¿algún parecido con la realidad? ?alguno se identifica?

No nos enseñaron nada sobre persuasión.

Nada sobre negociación.

Nada sobre cómo venderte y vender.

Nada es nada.

Y claro, intentar ganar más billete sin saber vender, es como querer hacer clavados sin una piscina, Pero, aunque sea un sinsentido, lo cierto es que a casi nadie le gusta vender.

Es lo que hay.

Bueno, a mí tampoco me gustaba vender ¿Por qué? Porque no sabía, lógico.

A ver te cuento

Cuando me inicié en ventas tenía unos 17 años, y era el joven más tímido que jamás hayas conocido. Te estarás preguntando: Entonces cómo hiciste para arreglártelas y vender siendo tan tímido? pues lanzándome a hacerlo muuuuchas veces, adquirí habilidades. Confieso, un amigo me ayudó… pero bueno, esto no se trata de mí. Si deseas conocer un poco mi historia mírala aquí.(botón que lleva a historia) pero te recomiendo que sigas leyendo… de pronto te aburre mi historia. Aunque es buena. eh!

Si no fuiste a ver mi historia y sigues aquí. Te tengo un trato…

Tú te apuntas a mi lista de correo y yo me comprometo a tres cosas:

    • A tratar de entrenarte.
    • A intentar venderte algo. Sí, me encanta vender.
    • A enseñarte a hacer una muy sencilla, que no fácil…

Una cosa.

Sólo una: Cómo mover dinero del punto A al punto B.

    • Punto A: La cuenta bancaria de tu cliente.
    • Punto B: La tuya.

En síntesis te mostraré cómo vender más.

Suscribirse es fácil, darse de baja también.

Te veo dentro, o no. Lo que indique tu corazón y el bolsillo. Hombe, que es gratis la suscripción.